Echo - Yukari

GÉNERO: Dance/Electrónica

CALIFICACIÓN: 79

Por Cassandra Mena

Fue difícil encontrar información detallada sobre este álbum, así que toda esta reseña será a ciegas y de acuerdo a dónde me dirigió Yukari o como actualmente es reconocida "Aseul".

Quiero empezar hablando de este álbum sobre el sonido que nos brindó a pesar de la época en donde todos sabíamos que era lo poderosamente popular en Corea del Sur y como este hit revolucionó el K-Pop a nivel mundial, el sencillo Gangnam Style es la referencia a lo que menciono y este sonido tan popular no se asemeja en lo absoluto a lo que nos brinda Yukari. Esto lo menciono para que si decides escucharlo, vayas con otro tipo de mentalidad, que en Corea no sólo es K-Pop y que la mayoría de estos artistas independientes, ex-traines o carreras que no fueron impulsadas por sus propias compañías realmente tenían algo que aportar a la cultura pop coreana y que por x o y razón no pudieron ser lo suficientemente potentes en el marketing coreano convirtiéndolos en artistas increíblemente infravalorados.

Una vez hecha la introducción, hoy los voy a conducir a este mundo dance/r&b un poco más tranquilo y suave, con un sonido que no se siente del 2012 y por supuesto con una voz airosa y cariñosa acompañando todas las canciones, combinando los idiomas inglés y coreano creando una pieza interesante para la era en la que éste se publicó. Lo más precioso y valioso de este álbum es que éstas canciones conectan entre sí de una manera potente y a veces es difícil reconocer el salto entre las canciones porque como tal no existe un cambio brusco, sino que es tan amble con la escucha que de verdad lo sientes y lo digieres muy bien. (Exceptuando el cambio de 8PM a Hang On que pasa de un sonido tranquilo a uno un poco más movido y con una ligera explosividad dándole al álbum un éxtasis peculiar). La sensación y las influencias ambientales de esta pieza son claras, podría atreverme a decir que sus influencias e inspiración se en encuentra en la música ambiental de los 70s y 80s combinándolo con un poco de la electrónica que comenzaba a sonar en la cultura pop occidental de los 00s/10s.

Lo más importante que debes saber cuando escuches este álbum es que el sonido es tan pacífico y suave que de verdad desde la primera canción no querrás quitarlo. No es un álbum que te pondrá a bailar como tal, pero sin duda alguna te hará sentirlo de una forma especial con sus ondas llevaderas y su producción exquisita. Este álbum es un modo más para decirle al mundo que la electrónica se comparte con sentimientos y sonidos que lleven al cuerpo y a la mente a dónde más lo esperan y desean, es la mejor definición que consigo de esta maravilla de álbum, que si no es perfecto, su media hora te hará saber que es excelente y si logras conectar de una manera íntima con él lograrás entender el concepto a la perfección.

cm/ly